Querría no decir nada, porque esto de los cementerios, sean del tipo que sean -excepto los cementerios de la estupidez humana- exigen un silencio reverencial, pero como los que van a decidir la cuestión no viven - ¡ni vivirán! - en Torrubia, habrá que poner el granito de trigo para hacer granero. Ahí una de las pancartas junto al edificio que acoge la representación del gobierno en la provincia.Un frío propio de la época propiciaba el movimiento de pies al ritmo de la percusión de bidones y tambores, que han amenizado la protesta. No mucha gente, si consideramos la importancia del tema, pero si se considera el frío y la poquísima implicación del soriano en casi nada, pues tampoco está mal.
Alguien que vio venir a este participante exclamó: "Joder, un político ya trae los bidones". Me pareció simpático el momento y me fotografié con él. A veces queda bien tener una foto de tí mismo con un personaje público. (Por si las dudas, el burro, en principio, es el de la derecha de la foto)
JA, JAJAJA, JAJA, JAJAJAJAJA, JE, JE, JE , JEJEJEJEJEJE, JU, JUJU, JUJU...JUUUIIII, cómo me duelen las mandíbulas... Esto sí que da risa. CASTILLA Y LEÓN -quitamos a León- CASTILLA - quitamos LLA, total paqué - CASTI - ahora quitamos lo superfluo por aquello de la crisis y mira lo que queda: A T I , no, si está visto ya.
Veis, veis cómo los bidones no hacen ná, niaunque les dis palos. No tenís fen los políticos, que son los quentienden y los questán pensandoen nosotros a todas horas. (Espero que Cevrantes no lea esto último, que mexcomulga del castellano, antes también español)
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